viernes, 18 de febrero de 2011

EL ALTO AMAZONAS DE LATHRAP

Este libro es producto de una locura, de una pasión por el mundo amazónico. No hablemos ya de la importancia del texto de Donald W. Lathrap, de por sí ya un clásico, sino de su gestor, Santiago Rivas Panduro, quien invirtiendo dinero y tiempo en esta aventura editorial soñó ver el libro de Lathrap traducido al español, para deleite y goce de los que solo lo podían leer a través de las respectivas ediciones en inglés y portugués. “¿Por qué The Upper Amazonas, se preguntaba hace más de diez años el joven Rivas, estudiante de Arqueología de San Marcos, no era publicado en español?”. Rivas no encontró una respuesta lógica a este enigma. Pensaría él, quizás, que el destino lo había puesto en el camino para emprender esta tarea: la de difundir la palabra escrita de Lathrap a todos los interesados en estudiar la selva amazónica. Casi enseguida se hundió en los papeles de este investigador norteamericano, que lanzó las primeras hipótesis sobre la evolución cultural de la Amazonía a través del estudio de los ceramios, y estableció los primeros contactos entre quienes podían coadyuvar con la edición en español, entre ellos el Dr. Richard Burger, amigo de Lathrap. Luego vinieron las arduas coordinaciones con quienes iban a ser los prologuistas del texto y quien iba a hacer la labor de traducción inicial del inglés, en este caso Lúcia Harumi. Todo esto fue un largo proceso de meses, de encuentros y desencuentros, de largas deliberaciones y consultas Pero los resultados saltan ahora allí a la vista. Una bella edición hecha de papel marfilado –ultra flexible para la comodidad de los lectores–, adornada con el rostro de una nativa sobre un fondo verde limón y naranja –que Donald W. Lathrap hubiera festejado en vida–, ha coronado el esfuerzo de Rivas, quien, arriesgando incluso su propia salud, ha desviado, según nos hemos enterado, dinero destinado para el tratamiento de una enfermedad que lo viene aquejando hace buen tiempo, para la realización de este sueño. Por ello, decíamos que este libro, sin bien es cierto pertenece íntegramente a Lathrap, es, en esta edición en español, el fruto de un apasionado, de alguien que cree en el poder de las palabras para cambiar el mundo, de un loco de esos que nunca faltan y nos recuerdan la emoción de vivir. Por último, no hay mejor homenaje para un escritor –cualquiera fuera la veta que lo alimente– que la de verse reconocido en las sucesivas reediciones de su obra. Este es uno de ellos.

Freddy Molina Casusol
Lima, 17 de febrero de 2011

UNA TESIS SOBRE YEROVI

HAY tesis que se convierten en libros como esta de Paulo Piaggi sobre el destacado dramaturgo Leonidas Yerovi, o como la que no muy reciente...