CUANDO era adolescente me preguntaba quién sería ese señor que escribía en
un lenguaje barroco esa columna periodística tan larga y ancha, que veía
publicada en El Comercio, en su
suplemento de los domingos. “El dardo en la palabra”, decía. Yo no tenía la menor
idea que quien escribía con tanta corrección, era toda una autoridad en el
idioma. Han pasado más de treinta años desde que vi por primera vez impresas
esas columnas, y pienso cuánta diversión y entretenimiento me he perdido todo
este tiempo (las dejaba pasar, en verdad). Fernando Lázaro Carreter, así se
llamaba el señor de las columnas, es un conocedor de la lengua del Quijote como
hay pocos. Entre los nuestros no alcanzan su talla –creo, sin exagerar un
ápice– ni Martha Hildebrandt ni Marco Aurelio Denegri –a veces extremado con su
purismo idiomático–. Don Fernando, sin duda era de otro lote, un ave de otro
vuelo. Ahora que no está, lamentamos su ausencia para poner la pica en Flandes
en la redacción de los periodistas. Leer El
dardo en la palabra es salir bañado de aguas lustrales. Realmente uno se
desasna y se avergüenza de las torpezas cometidas a la hora de perpetrar un
párrafo. Cada una de sus entradas, preciosistas, llenas de lucidez, son un
premio a la lectura. Lázaro Carreter te jala las orejas sin agraviarte, y sin
ese asomo de pedantería lingüística con la que se embadurnan algunos en las
aulas. Ejerce la docencia con la simpleza de quien desea compartir lo que sabe.
Da gusto leerlo, pero sobre todo releerlo. En este primer volumen –hay un segundo
publicado años después–, que reúne la mayor parte de sus columnas periodísticas
desde 1975, pone toda su ciencia, todo su arte al servicio de la comunidad
idiomática en castellano. ¿La mejor? Difícil elección: todas. Tenga, pues, fino
lector, la dicha de probar de tan exquisito manjar. Lo esperan más de 700
páginas, salidas de la mismísima mano del maese Lázaro –al que no se debe
confundir con el bíblico–, el señor de las columnas de mi barroca adolescencia.
Freddy Molina Casusol
Lima, 25 de setiembre de 2016
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